Adaptación de la evaluación presencial a evaluación online
Author: Angel Fidalgo
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Las asignaturas online se diseñan con procesos propios y característicos de este tipo de enseñanza, entre esos procesos está la evaluación. La evaluación suele utilizar software que sirve para acreditar la identidad de las personas con reconocimiento facial, grabación constante del alumnado para analizar movimientos sospechosos e incluso permite explorar la estancia donde el alumnado está haciendo el examen.
Sin embargo, por la situación actual derivada de la pandemia, se han tenido que interrumpir asignaturas presenciales y seguir un proceso de formación online. Dichas asignaturas no estaban diseñadas para impartirlas online, parte del profesorado tampoco está preparado para impartir docencia online y los centros no suelen disponer software biométrico para la realización del examen.
Teniendo en cuenta toda esta situación problemática e imprevista, ¿cómo podemos plantear el proceso de evaluación de toda la formación online impartida?
Hay dos planteamientos: Trasladar el proceso de evaluación presencial a virtual o crear un nuevo planeamiento.
Traslación del proceso presencial al virtual
Por un lado tenemos la formación online y por otra la evaluación. La formación online se imparte de diversas formas (videos, apuntes pdf, presentaciones, videoconferencia, etc.) y posteriormente se realiza la evaluación.
Realizar un examen online es relativamente sencillo, con cuestionarios, tareas (por ejemplo, desarrollo de un problema y entrega del mismo). Pero el problema no reside ni en el tipo de examen ni en la forma de realizarlo. La problemática reside en las labores que se hacen durante la realización del examen:
- La acreditación de las personas que participan en el examen.
- La certeza de que no copian ni utilizan materiales no permitidos (chuletas, libros y dispositivos electrónicos).
- La certeza de que no se comunican con otras personas (compañeros de la asignatura o personas externas).
- La custodia de los exámenes.
Si en una determinada asignatura hay pocos participantes (hasta 10) no hay mucho problema en resolver dicha problemática, ya que el profesorado puede reconocer la persona, pedirle identificación, compartir pantalla y seguir visualmente los movimientos que realiza. Pero si la asignatura, por ejemplo, tiene 200 estudiantes, es muy complicado resolver la distinta problemática y por consiguiente garantizar que el examen lo ha realizado una determinada persona y que no ha recibido ayuda para realizarlo. En este caso, no habría más remedio que utilizar el software biométrico o fiarse de que el alumnado no va a copiar.
Nuevo planteamiento.
Este planteamiento está basado en la evaluación continua y se basa en que durante el periodo de formación el alumnado, este vaya dejando evidencias sobre sus actividades académicas.
Al ser una formación online es relativamente sencillo identificar y analizar las evidencias, por ejemplo: asistencia a una sesión virtual, lectura de apuntes, seguimiento de videos, realización de cuestionarios (que incluso se pueden utilizar para comprobar la lectura de apuntes o visionado de videos), pequeñas evaluaciones formativas y entrega de trabajos.
El proceso de evaluación consiste en el análisis y valoración de esas evidencias y el examen final (realmente es una prueba más de evaluación continua) se basa en comprobar que el alumnado ha adquirido las competencias que su historial refleja.
Esto, dependiendo del tipo de asignatura, se podría hacer mediante un conjunto de preguntas a cada alumno por videoconferencia para comprobar que ha realizado el trabajo. Por ejemplo, en programación, para comprobar que ha realizado el programa basta con cambiarle una línea de programación y preguntar qué ocurre en ese caso.
Así pues, dedicando entre 5 y 10 minutos para cada alumn@ podemos comprobar si ha adquirido las competencias que reflejan sus evidencias. Parece mucho tiempo (sobre todo si hay 200 alumn@s), pero realmente es mucho menos tiempo del que se dedica a corregir un examen normal. Eso sí, todo el tiempo que ahorramos en la evaluación lo hemos dedicado (y con creces) a realizar la formación online y el seguimiento de evidencias.