Entrevistamos a Helga Holtkamp, presidenta de la EEPG, para hablar sobre los editores, creadores de contenidos educativos y materiales didácticos. ¡No te pierdas esta entrevista tan interesante!¿Qué es la EEPG y cuál es su misión?
El European Educational Publishers Group es una organización sin ánimo de lucro dedicada al avance de la calidad en la educación y, especialmente, el de los materiales de aprendizaje. Los editores intercambian ideas y conceptos a nivel internacional, sobre temas como, por ejemplo, la innovación y la digitalización. Organizamos reuniones de forma regular, donde oradores de diferentes ámbitos, así como representantes de la ONU, la OCDE o la UNESCO informan sobre tendencias educativas y se comparan y evalúan las mejores prácticas de todo el mundo.

¿Quiénes forman parte de la EEPG?
La conforman 24 editores educativos y productores de materiales de aprendizaje de 23 países diferentes, entre ellos Austria, la mayoría de los estados balcánicos, los países bálticos y escandinavos, Alemania, la República Checa, Polonia, Portugal, Ucrania, Israel y, por supuesto, España.

¿Cuál es el papel que desempeñan los editores y creadores de contenidos en la evolución de la educación?
Los editores somos parte de la cadena de valor. Nuestra misión es convertir los planes de estudio que gobiernos o instituciones han ideado en material manejable para la enseñanza. Los libros u otro tipo de materiales, proporcionan una ruta de aprendizaje (ya sea lineal o concéntrica) que nos encargamos de organizar en unidades. Aportamos la metodología y la ayuda necesaria para que  los profesores puedan estructurar un plan de estudios en unidades viables.

¿Qué relación tienen los editores con la educación?
En muchos casos, los autores y editores provienen de la enseñanza, por lo que conocen y abordan los problemas que tienen los profesores y sus estudiantes, como pueden ser la diferenciación, individualización o inclusión. Los materiales de enseñanza actuales tienen en cuenta todos estos aspectos y se analizan cuidadosamente para verificar su exactitud y su presentación imparcial.  Todo este trabajo hace que los profesores puedan confiar en el material que están utilizando en sus aulas.

¿Considera interesante que haya un diálogo entre la administración educativa, docentes y editores para la mejora de los contenidos educativos?
La educación es una empresa conjunta, que no se puede abordar individualmente, por el bien de los profesores, estudiantes y padres. Por lo tanto, todas las partes deben estar involucradas en el proceso, pero también es necesario conocer el papel que desarrolla cada uno de estos actores. Esto también implica que exista una sana competencia entre los proveedores de materiales educativos y, además, hace necesario que los gobiernos no impongan reglas y regulaciones que no sean transparentes, como sucede en algunos países. Es importante que los autores no trabajen en un entorno aislado y que sean conscientes de las necesidades de profesores y estudiantes que, por otra parte, se encuentran en constante cambio.

¿Cuál /cuáles debería ser el recurso fundamental de un profesor para impartir una asignatura?
Esto depende de la personalidad del profesor, así como de las circunstancias individuales. Pero estudios recientes en varios países muestran que los profesores dependen, en gran medida, de los materiales publicados con los que trabajan. Y esto también es algo positivo. Al utilizar materiales que ya han sido completamente estructurados y adaptados, el maestro puede dedicar su valioso tiempo a su papel más importante: interactuar con los estudiantes, en lugar de fotocopiar o cortar y pegar desde Internet.

El mundo educativo cada vez está más digitalizado ¿los libros de texto desaparecerán?
Los libros de texto impresos no desaparecerán en mucho tiempo. Las novelas o los libros de cuentos tampoco lo han hecho, si bien, los diccionarios impresos son casi obsoletos, ya que podemos acceder a ellos digitalmente. Desde mi punto de vista, no se trata de si los libros de texto se extinguirán, la cuestión más importante es si el contenido curado y estructurado será necesario dada la facilidad de acceder al conocimiento. Pienso que seguirá siendo necesario, porque la metodología es un factor muy relevante en educación. A pesar de ello, no cabe duda que podemos aprender muchas cosas en YouTube, lo que nos obliga a repensar constantemente la forma en que presentamos y ponemos en práctica el contenido.

¿Son beneficiosas las estrategias de blended learning en las escuelas?
Rotundamente sí. Especialmente si pensamos en los estudiantes, ya que el aprendizaje combinado les permite trabajar a su ritmo y realizar sus propias investigaciones. Tienen acceso a la tecnología y pueden presentar sus hallazgos a través de simulaciones o realidad aumentada. Sin embargo, para que este tipo de aprendizaje funcione es muy importante que los maestros estén capacitados para guiar correctamente el trabajo.

Dada su visión de conjunto, considera que la digitalización avanza de manera semejante en los diferentes países miembros de la EEPG. ¿Qué países han apostado más por la digitalización?
Probablemente no se trata de valorar quiénes están más desarrollados, más bien habría que partir del tiempo en que se iniciaron en estos procesos. Algunos países como los escandinavos están más avanzados y, otros como Alemania, que fueron de los primeros adaptadores, ahora están rezagados debido a la falta de infraestructura. Mi opinión es que en unos años no nos plantearemos los medios que utilizamos y analizaremos directamente lo que es bueno para estudiantes y profesores, más allá del desarrollo de la tecnología.

¿A qué retos se enfrentan los creadores de contenidos educativos europeos en los próximos años?
Las grandes empresas tecnológicas están entrando en el mercado y  algunas personas promueven el uso de REA (Recursos Educativos Abiertos) en todos los escenarios de la enseñanza. Pero es importante que los profesores y los responsables de los planes de estudios comprendan la diferencia entre estas empresas y los editores educativos profesionales. Resulta esencial que los editores demostremos que aceptamos el desafío, y que entendemos la digitalización y que ya estamos  produciendo contenido en todo tipo de medios. Además, la utilización de la tecnología nos debe ayudar a facilitar el trabajo de diferenciación e individualización al que se enfrentan los profesores.

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