Recién mudado a la ciudad de México en 2014 me topé con una mole en construcción, lo que devendría en Centro Diseño, uno de mis lugares soñados de trabajo tiempo despué. En ese entonces Centro diseñaba un evento VOR, que aún no se realizaba en la sede neonata, pero que trataba temas entrañables como los pares inusuales.

VOR | 2014 from oncentro on Vimeo.

Se trataba de un llamado a contrastar voces para dar cuenta de la riqueza de respuestas que las combinaciones inusuales ofrecen para resolver problemas contemporáneos

En ese entonces no sabíamos que los pares inusuales eran una forma de lo antidisciplinario (Joi Ito), de la confrontación enfática de puntos de vista, de la necesidad de romper para siempre las murallas de las universidades napoleónicas -sobre las cuales están basadas casi todas las existentes hoy- que anulan la posibilidad de la binocularidad y sobretodo de entender lo mismo con ojos nuevos.

Algo que ocurre día a día en el MediaLab del MIT, y muy especialmente que se visibiliza en la obra de una parista inusual como es el diseño bio-inspirado de Neri Oxman (y su equipo de muchas manos y mentes).

O como lo está haciendo la increíble Angela Belcher -directora del Biomolecular Materials Group en el MIT- basándose en las conchas de la abulón (u oreja de mar) para crear nuevas baterías.

Siguiendo esa huella todos los domingos jugaremos con la presentación de pares inusuales de libros, jugando con contrastes históricos y con la inactualidad de lo actual.

TESIS en 2009 Mark Bauerlein rompe lanzas y define a los millenials como a la generación mas estúpida de la historia anticipando las diatribas de Nicholas Carr y otros tecno-pesimistas, exacerbada hoy por la destrucción de la democracia fomentada por las redes sociales.

Mark Bauerlein The Dumbest Generation: How the Digital Age Stupefies Young Americans and Jeopardizes Our Future (Or, Don ‘t Trust Anyone Under 30). TarcherPerigee, 2009.

En las últimas décadas, la forma en que vemos la adolescencia en sí misma ha cambiado, creciendo desde un punto muerto en el camino hacia la edad adulta hasta su propio espacio en la sociedad, completamente separado de la vida adulta. Este cambio en la cultura adolescente ha ido de la mano con una infantilización insidiosa de nuestra cultura en general. A medida que los adolescentes continúan separándose del mundo de los adultos, han construido los suyos, adquiriendo más dinero para gastar, dirigiendo las aulas y la cultura hacia sus propias necesidades e intereses, y ahora usando la tecnología que alguna vez se promocionó como la mayor esperanza para que sus futuros se entreguen a diversiones, desde MySpace hasta videojuegos multijugador, 24/7.
 
¿Puede una nación continuar disfrutando del predominio político y económico si sus ciudadanos se niegan a crecer?

ANTITESIS en 1970 Margaret Mead acuña la expresión culturas pre-figurativas mostrando que la brecha generacional de los últimos 50 años es intratable con las categorías tradicionales de las humanidades y las ciencias sociales. Necesitamos toolkits cognitivos superadores del binarismo de Bauerlein y sus acólitos.

Margaret Mead. Cultura y Compromiso. Ensayo sobre la ruptura generacional. Buenos Aires, Gedisa, 1980.

Hasta hace muy poco tiempo, los adultos podían decir: «¿Sabes una cosa? Yo he sido joven y tú nunca has sido viejo». Pero los jóvenes de hoy pueden responder: «Tú nunca has sido joven en el mundo en el que soy joven yo, y jamás podrás serlo». Hoy, súbitamente, en razón de que todos los pueblos del mundo forman parte de una red de intercomunicación con bases electrónicas, los jóvenes de todos los países comparten un tipo de experiencia que ninguno de sus mayores tuvo o tendrá jamás. A la inversa, la vieja generación nunca verá repetida en la vida de los jóvenes su propia experiencia singular de cambio emergente y escalonado. Esta ruptura entre generaciones es totalmente nueva: es planetaria y universal