La colateralidad del aprendizaje en red.
Author: juandon
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juandon
El aprendizaje en RED es colateral, aunque como hemos mostrado las TIC se pueden utilizar como soporte para la construcción de conocimientos y aprendizajes. LA RED EN SI MISMA HOY SE CONVIERTE EN EL MISMO APRENDIZAJE.. Esto es fundamental hoy en día; el rápido desarrollo de los conocimientos significa que tenemos que encontrar nuevas formas de aprender y mantenerse al día. No podemos aumentar nuestra capacidad para el aprendizaje hasta el infinito. Tenemos que empezar a concebir
el aprendizaje como socialmente en red y mejorado por la tecnología (que es una simbiosis de las personas y la tecnología que forma nuestras redes de aprendizaje). Tenemos que reconocer nuestro contexto de aprendizaje no sólo como un facilitador del aprendizaje, sino como un participante del propio aprendizaje.
Está demostrado que en la educación formal, los docentes (no digo las instituciones, organizaciones educativa, centros y demás) que están en “la red”, es decir, que trabajan y aprenden en la misma, los académicos que tienen identidades digitales en abierto (por ejemplo, Twitter, blogs) lo comparten con los estudiantes como una forma de intercambio de información y / o participar en la conversación y en las propias clases que imparten, trabajen donde trabajen. La creación de actividades de aprendizaje en espacios abiertos en línea – estos académicos crean las actividades de aprendizaje abierto para los estudiantes, por ejemplo, invitar o exigir a los estudiantes a usar una cuenta de Twitter, participar en charlas en la web de Twitter durante la clase, los blogs y / o la creación de cursos en espacios abiertos en línea (por ejemplo, el blog de WordPress con licencia Creative Commons), animan a los estudiantes a compartir sus proyectos de medios digitales, por ejemplo, en un grupo de Facebook público…
Utilizando el método comparativo constante de análisis, nos podemos enconytrar con:: la valoración del aprendizaje social, el equilibrio entre privacidad y la apertura, el crecimiento de la mentalidad de alfabetizaciones digitales, y las expectativas de roles desafiantes.
Podemos valorar el aprendizaje social Se puede identificar explícitamente su filosofía de enseñanza como del constructivismo
social, esfuerzos para alentar una mayor discusión de los estudiantes y el compromiso, la importancia de crear una comunidad de aprendizaje, y la participación en la construcción del conocimiento, junto con sus estudiantes. Las actividades sociales no fueron creadas para el aprendizaje en las aulas pero se pueden desarrollar dentro de los entornos de aprendizaje, pero siempre con una visión ABIERTA, INCLUSIVA Y UBICUA, , si pretendemos darle un sentido ÚNICO de formalidad y prescripción, en este momento PIERDE TODO SU VALOR.
De esta manera los aprendices pueden reflexionaron sobre sus identidades / actividades personales y profesionales en línea, Algunos se preocupan por el colapso contexto, es decir, los flujos de conversaciones sobre el trabajo, la vida familiar, las actividades sociales, deportes, política, etc. Otros quieren distinguir entre sus actividades en línea personales y profesionales el límite más desafiante para administrar a menudo con sus colegas inmediatos. Esto se expresa con mayor frecuencia como el dilema: voy a aceptar esta solicitud de amistad de mi colega / conocido de trabajo en Facebook? Todos debemos tener claro que aprendemos por decisiones personales, pero que está bajo nuestra RESPONSABILIDAD Y COMPROMISO, hacerlo correctamente cuando interactuamos con otros (SOCIAL LEARNING).
Aun así muchos docentes se mantienen en establecer LINEAS DIVISORIAS entre PROFESORES-ESTUDIANTES (líneas rojas que los estudiantes no pueden pasar y que los docentes no pueden aceptar) Esto se expresa con mayor frecuencia como mantener una distancia profesional.
Mentalidad del crecimiento Re: alfabetizaciones digitales:
El personal académico que valoran el aprendizaje social y que equilibran la privacidad y la apertura pueden estar predispuestos a la utilización de prácticas de educación abierta para la enseñanza. Sin embargo, otro factor necesario es tener las alfabetizaciones digitales, o quizás más específicamente, que tiene una mentalidad de crecimiento re: alfabetizaciones digitales.
[Tener una mentalidad de crecimiento re: alfabetizaciones digitales incluye ser conscientes de una serie de herramientas digitales abiertas; comprensión de cómo utilizar varias herramientas, tanto técnica como pedagógicamente; mantenerse al corriente de los cambios en el paisaje de las herramientas digitales y abiertas; y lo más importante, tener mucha confianza sobre el aprendizaje y la experimentación con nuevas herramientas y nuevas características. El personal con alfabetizaciones digitales altamente desarrolladas son más propensos a tener la confianza y las habilidades necesarias para gestionar la configuración de privacidad, negociar diversas herramientas de medios sociales, y operar con la agencia en ecosistemas complejos de medios sociales.
Una de las tareas más importantes es definir lo mejor posible el perfil o perfiles de usuario al que nos dirigimos. Lo que diferencia a un creador de materiales amateur de un profesional es que el primero piensa en su material el segundo en los destinatarios;
La nueva visión de la educación promueve el uso de la tecnología informática para facilitar el aprendizaje mediante la participación de los estudiantes, la promoción de la creatividad, fomentar el aprendizaje autodirigido, la colaboración y habilidades de pensamiento avanzado.
Si pretendemos llevar a cabo el aprendizaje permanente y a lo largo de toda la vida (life long learning) ¿será importante crear cimientos para prepararse para otras situaciones de aprendizaje y/o crear un falso sentido de aprendizaje?
Supongo que coincidiremos que habrá que prepararse personalmente y socialmente y no solo esto, sino asociarlo también con una transformación de contextos y eso dentro de la creación de una NUEVA CULTURA con otros valores.
Podrá pasar que algunos dirán que también se puede producir “un falso aprendizaje” y es verdad, pero eso será siempre por lo que se entienda por aprendizaje y a lo que cada personas está dispuesta a realizar.
Es un camino que se dice complicado, cuando realmente es de lo más fácil que podremos hacer, lo que ocurre es que no nos damos cuenta la mayor parte del tiempo o también, que no queremos que suceda ya que estamos bien con lo que hemos hecho todo el tiempo.
Una forma ampliamente aceptada de entender el aprendizaje en la sociedad en general, y también en los medios universitarios y de formación continua, es concebirlo en términos de adquisición y retención. Algunas de las características que esta orientación promueve en los estudiantes pueden ser:
aumenta su almacén de datos;
construye un repertorio de destrezas y procedimientos;
divide los problemas en subunidades;
trabaja de forma lógica y metódica;
utiliza destrezas de memorización;
establece vínculos dentro de unidades de conocimiento;
utiliza de forma sistemática el ensayo y error para solucionar problemas.
Esta última orientación es coherente con la filosofía constructivista, en boga en los medios de educación y formación. En el ámbito de la tecnología educativa, superada la etapa de los prolegómenos del modelo de enseñanza asistida por ordenador (CAI), y ampliando los horizontes de la inteligencia artificial hacia una diversificación de paradigmas psicopedagógicos y ampliando los horizontes de la inteligencia artificial hacia una diversificación de paradigmas psicopedagógicos (Ruiz Carrascosa, 1995), podemos afirmar que con el desarrollo de los sistemas multimedia e hipermedia y de las redes telemáticas estamos asistiendo a una revitalización de conceptos alternativos de instrucción bajo nomenclatura nueva, tales como ‘constructivismo’, y ‘aprendizaje colaborativo’.
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Estos modelos, que se pueden describir bajo los parámetros del aprendizaje flexible y situado, la construcción social de los conocimientos y la implicación personal en los contenidos a tratar, demandan formas alternativas de evaluación del aprendizaje.
- Nuevas formas de evaluación para nuevas formas de enseñanza-aprendizaje Las nuevas tecnologías, especialmente las basadas en la web, están conduciendo a la enseñanza y a la formación hacia direcciones que pueden parecer oportunas desde el punto de vista político o económica, pero que no siempre resultan ideales desde la perspectiva pedagógica.
- Aunque el aprendizaje a través de plataformas basadas en la web puede presentarse como ‘técnicamente novedoso’, esto no conduce automáticamente a mejorar la calidad de dicho aprendizaje. Un diseño didáctico de calidad lo es con independencia del medio; otra cosa es que este último ofrezca mayores posibilidades de aplicación. Algo similar ocurre con la evaluación del aprendizaje cuando éste se ha realizado básicamente en plataformas de teleformación. Del mismo modo que es posible diseñar entornos de aprendizaje con tecnología hipermedia que soporten principios constructivistas en los aspectos más técnicos, pero no en la filosofía subyacente del modelo, se puede estar cometiendo el error de no aprovechar las posibilidades que brindan las nuevas tecnologías para reflexionar sobre nuestras prácticas evaluativas y su coherencia con el enfoque de aprendizaje adoptado.
Por tanto, al planificar la evaluación del aprendizaje en un medio como Internet, deberíamos partir de las respuestas que demos a una serie de consideraciones previas:
Considerar las herramientas y posibilidades de evaluación que ofrece el entorno de aprendizaje basado en Internet que hemos desarrollado.
Explorar las formas de evaluación más coherentes con el enfoque de aprendizaje adoptado.
Contemplar el modo de integrar armónicamente las opciones tomadas en los niveles de decisión anteriores.
2.1. Herramientas y posibilidades de evaluación a través de Internet
Una de las herramientas que más se ha venido utilizando para la evaluación del aprendizaje a través de Internet es el software para diseñar pruebas cerradas con posibilidad de autocorrección. Las principales ventajas que ofrecen este tipo de métodos han sido puestas de manifiesto por McCormack y Jones (1997)
Ahorra tiempo en su desarrollo y distribución.
Reduce el tiempo de respuesta, aumentando el efecto positivo del feedback.
Reduce los recursos humanos y materiales necesarios.
Permite el almacenamiento de los resultados y su posterior tratamiento.
Flexibiliza el momento en el que el alumno ha de realizar la evaluación.
Así, este tipo de evaluaciones basadas en la web aporta ciertos beneficios educativos. Desde el punto de vista del estudiante, la evaluación frecuente y periódica proporciona un refuerzo de los conceptos y aumenta la motivación. Los formadores, por su parte, pueden diseñar revisiones para cada módulo sin preocuparse de tener que encontrar el tiempo y los recursos para analizar los resultados: como discutimos más adelante, la mayoría de estos instrumentos ofrecen informes automáticos.
Los estudiantes pueden acceder a estas pruebas en cualquier momento, de forma privada y en la comodidad de su propio hogar. Puesto que los resultados están informatizados, los estudiantes reciben un feedback inmediato. Esto puede ayudar también a aquellos alumnos que sufren de ansiedad ante las pruebas de evaluación a que se relajen, así como minimizar el agobio de aquellos que suelen rendir menos.
Cuando la era del aprendizaje a través de Internet comenzaba a dibujarse, Romiszowski (1993) ya mostraba su preocupación por lo que él denominaba como una tendencia hacia la interactividad de nivel superficial, en función de la cual los alumnos disponen del control para navegar a través de amplias cantidades de información. Él argumentaba que, aunque esto puede parecer un medio capacitador, al menos que al estudiante se le den unos objetivos de aprendizaje específicos no tendrá criterios claros para elegir a qué contenidos acceder.
En este sentido, el uso de pruebas y tests de autoverificación, si están bien pensados y diseñados, pueden contribuir a orientar el proceso de aprendizaje de los alumnos, ayudándoles a comprobar si los aprendizajes que están realizando responden efectivamente a lo que se espera de ellos.
McCormack y Jones (1997: 241-242) han reparado también en los inconvenientes de este tipo de instrumentos:
Puede fomentar que los estudiantes se acostumbren al método de señalar y pulsar, generando cierta dificultad en pruebas que demanden una mayor profundidad en las respuestas.
Puede percibirse como un método impersonal, propiciando en los estudiantes un sentimiento de anonimato y aislamiento al verse enfrentados solos ante una máquina. Someter a los estudiantes a un continuo uso de estos tests puede provocar que éstos pierdan su valor como instrumentos de evaluación.
La posibilidad de consultar el material antes de ofrecer las respuestas y la tendencia a introducir cuestiones sencillas para proporcionar un feedback positivo pueden fomentar un falso sentido de confianza entre los estudiantes.
La dificultad de introducir cuestiones de alto nivel en este tipo de pruebas puede generar un aprendizaje memorístico y la sensación de que lo único que se requiere es la memorización del material.
La naturaleza de las respuestas puede ser restrictiva.
En definitiva, este tipo de pruebas responde a un modelo de aprendizaje más behaviourista, por lo que sus aportaciones en entornos constructivistas deben estar cuidadosamente planificadas. En este sentido, desde un modelo de aprendizaje autónomo se pueden aprovechar sus potencialidades de motivación, feedback inmediato y auto-control de los contenidos que cada uno va abordando, más que utilizarlas como medidas de control externo del aprendizaje. Por ello, en su diseño resulta interesante incluir pistas que sugieran a los alumnos las respuestas correctas, así como vínculos con los materiales de referencia relacionados con esos contenidos.
Aunque los tests de autocomprobación constituyen la herramienta más explotada para evaluar el aprendizaje a través de Internet, la red ofrece otros recursos con un alto valor pedagógico. El correo electrónico permite adjuntar ficheros con reflexiones en torno a un tópico, construcciones personales sobre un problema de investigación, resultados de búsquedas bibliográficas, posibles respuestas a un caso-problema presentado por el profesor, etc. Este tipo de trabajos, además de beneficiarse de las ventajas de flexibilidad apuntadas para los tests de autocomprobación, comportan un enfoque hacia los procesos de comprensión y transformación de conceptos.
La mayoría de entornos integrados, además, permiten la posibilidad de publicación de estos trabajos, de forma que todos los alumnos puedan acceder a ellos y fomentar de este modo prácticas de revisión entre iguales. Otras herramientas, como el chat o las listas de discusión, con formato sincrónico o asincrónico respectivamente, tienen un alto potencial no sólo para el intercambio de ideas y, por tanto, para el aprendizaje, sino también para la evaluación, especialmente en el caso de la evaluación de actitudes.
Otra forma de entender el aprendizaje es concebirlo en términos de comprensión y cambio conceptual. De acuerdo con Atkins (1993), los estudiantes que se acercan a esta orientación manifiestan las tres características siguientes:
Un dominio de los principios y conceptos, incluyendo la capacidad de aplicarlos a una comprensión del ‘mundo real’; una comprensión de los métodos de construcción del conocimiento que utiliza una disciplina determinada; un compromiso con el contexto social de esa disciplina, incluyendo cuestiones éticas y morales relacionadas.
“La evaluación como aprendizaje (Personalización):… se basa en la investigación acerca de cómo ocurre el aprendizaje, y se caracteriza por los alumnos reflexionan sobre su propio aprendizaje y hacen los ajustes para que logren una comprensión más profunda
La evaluación como aprendizaje es la responsabilidad de los alumnos, que deben aprender para articular y defender la naturaleza y la calidad de su aprendizaje. Cuando los alumnos reflexionan sobre su propio aprendizaje y lo “comunican” a los demás que están intensificando sus conocimientos sobre un tema, sus puntos fuertes sobre aprendizaje, y las áreas en las que necesitan para desarrollar aún más (retroalimentación), entonces es cuando se produce EL AUTÉTICO APRENDIZAJE..
El aprendizaje asistido por ordenador debe promover:
a-el aprendizaje significativo y la colaboración implique tareas desafiantes y de la vida real;
b-la tecnología como una herramienta para el aprendizaje, la comunicación y la colaboración
c-evaluaciones basadas en el rendimiento (por ejemplo, si queremos saber si un estudiante puede colaborar mediante el uso de la tecnología, no tendríamos que escriban un ensayo sobre el tema, solo volveríamos a ver a colaborar con otros estudiantes) .
También los formularios en HTML pueden utilizarse para evaluar la comprensión de conceptos y, más especialmente, para la evaluación de las ideas previas de los estudiantes en torno a determinados contenidos de aprendizaje. Los formularios en HTML permiten que el profesor reciba cierto feedback por parte de los estudiantes relacionado con el aprendizaje que estos últimos están realizando. Brooks (1997) los considera por eso como una estrategia interactiva de gran utilidad, aunque reconoce que su integración en entornos de aprendizaje a distancia requiere hoy por hoy conocimientos de programación. Un editor de HTML, no obstante, nos permite crear formularios sencillos que se remiten directamente a la dirección electrónica que se desee. Una opción algo más compleja, pero igualmente viable y de gran utilidad, es construir formularios utilizando CGIs, lo que nos permite, entre otras cosas, preservar el anonimato del alumno emisor.
2.2. Enfoques alternativos de evaluación
En el diseño de entornos constructivistas se ha comenzado a extender la idea de evaluación alternativa, como reflejo de la frustración con los enfoques
tradicionales de evaluación, y del deseo de determinar el logro de metas educativas de orden superior que impliquen una comprensión profunda y el uso activo del conocimiento en contextos complejos y reales (Reeves y Okey, 1996). Hammond y Collins (1991), plantean el tema de la evaluación alternativa en procesos de aprendizaje autodirigido, y la entienden básicamente como aquélla en la que los sujetos de aprendizaje intervienen de algún modo en el establecimiento de los criterios de evaluación y en el mismo proceso evaluativo. En este sentido, ellos ofrecen al menos cinco razones por las que se debe fomentar la autoevaluación y la heteroevaluación entre iguales en procesos de aprendizaje autodirigido:
La evaluación alternativa es consistente con los principios del aprendizaje autodirigido, y cuestiona a la evaluación tradicional como una de las fuentes de mayor poder del profesor en sistemas convencionales.
La evaluación alternativa promueve el aprendizaje, en la medida en que está diseñada para constituirse en una oportunidad para éste tenga lugar.
La evaluación alternativa muestra respeto por los estudiantes y por sus opiniones, y entiende que el aprendizaje es un proceso interno que no puede medirse con exactitud desde fuera.
La evaluación alternativa proporciona preparación para el aprendizaje continuo, que depende de la adquisición de destrezas de autocontrol y autoevaluación.
Es posible confiar en la autoevaluación y la heteroevaluación entre iguales; de hecho, más que sobrestimar el propio rendimiento los estudiantes suelen hacer lo contrario. Algunos enfoques de evaluación alternativa llevan cierto tiempo aplicándose en entornos constructivistas bajo formas como la evaluación auténtica, la evaluación de la actuación, la evaluación de portfolio, etc.
Una descripción somera de cada una de estas modalidades de evaluación puede encontrarse en Reeves y Okey (1996). Se trata en su mayoría de enfoques que han surgido en campos como el arte, el ejército o la ingeniería, y que han comenzado a aplicarse al ámbito educativo. Todas tienen en común su relación directa o incluso su identificación con las mismas tareas de aprendizaje. Aunque su puesta en práctica no está exenta de problemas, en conjunto constituyen modalidades con cierto potencial para proponer mecanismos alternativos de evaluación. Sin necesidad de adoptar un compromiso con ninguna de ellas, cada una puede ofrecer aportaciones interesantes en la planificación de la evaluación:
De la evaluación auténtica podemos quedarnos con la idea de que las tareas propuestas deben lograr en el que las realiza un sentido de pertenencia y una actitud positiva hacia ella (es decir, valorar su utilidad), y han de aplicarse con fidelidad (es decir, con posibilidad de replicación) a situaciones reales.
De la evaluación de la ejecución es importante considerar el énfasis en planificar actividades válidas con referencia a un propósito específico, así como contemplar la posibilidad que tales actividades ofrecen para la aplicación del conocimiento en contextos poco definidos y abiertos a múltiples alternativas, cada una de las cuales demanda la puesta en marcha de procesos de orden superior y destrezas de resolución de problemas.
De la evaluación de portfolio destacamos la importancia otorgada tanto al proceso como al producto, así como los beneficios derivados de compartir estos trabajos entre los propios estudiantes.
Tomadas en conjunto estas aportaciones, resulta evidente que las mismas actividades que se proponen para el aprendizaje de unos contenidos pueden ser usadas legítimamente para evaluar su adquisición. Para Reeves y Okey (1996) los entornos de aprendizaje constructivistas y la evaluación alternativa ayudan a hacer difusa la tradicional división entre aprendizaje y evaluación, que es endémica en la mayoría de los escenarios educativos, y sugieren una serie de razones por las que en un entorno constructivista no tiene sentido la separación entre actividades de aprendizaje y de evaluación:
Los entornos de aprendizaje constructivistas están relacionados con el qué y el cómo del aprendizaje, o lo que es lo mismo, no sólo con los resultados de aprendizaje, sino también con los procedimientos por medio de los cuales se aprende.
La evaluación en entornos de aprendizaje constructivistas debe ser tan amplia y variada como el entorno mismo.
Las limitaciones de recurso y tiempo sugieren que las mismas actividades que sirven para aprender sirvan también para evaluar.
La evaluación debería presentarse de forma marcadamente distinta que en los tradicionales contextos de evaluación, que analiza el conocimiento de forma fragmentada y descontextualizada en lugar de analizar la actuación ante tareas del mundo real.
La apertura y transparencia debe presidir los procedimientos y criterios de evaluación, del mismo modo que el constructivismo fomenta un diálogo similar con relación a qué aprender y de qué forma hacerlo.
2.3. Incorporación de los métodos alternativos de evaluación a través de Internet
De lo apuntado hasta el momento se desprende que un entorno constructivista demanda recursos que permitan incluir la motivación como un factor importante en el procedimiento de evaluación, especialmente en entornos que dependen demasiado de factores de motivación intrínseca, como es el caso del aprendizaje autorregulado vía Internet. A ello puede contribuir el uso de pruebas autoverificables, que en cualquier caso necesita complementarse con otras modalidades más divergentes, como los ensayos abiertos o tareas de desarrollo en torno a un tópico, así como evaluaciones que consideren la auto-revisión, la evaluación entre iguales, el nivel de participación en listas de discusión, etc.. Estas otras modalidades no tienen por qué ser distintas de las tareas propuestas para el aprendizaje, siempre y cuando en su diseño intervengan algunos de los principios del aprendizaje adulto:
El foco de las actividades de aprendizaje y evaluación ha de estar en la aplicación y el uso activo del conocimiento en situaciones reales y poco definidas.
La propuesta de tales actividades debe responder a objetivos claros y explícitos.
El alumno debe encontrar valor formativo y a la vez evaluativo en tales tareas, por lo que la optatividad y diversidad en las propuestas debe ser una variable real.
El propósito mismo de la evaluación debe estar orientado a enfatizar los puntos fuertes del estudiante y proporcionarle información que le capacite a hacer sus propias decisiones sobre metas y actividades de aprendizaje.
Es importante fomentar la reflexión sobre las tareas realizadas, la autoevaluación con respecto al nivel de dominio de los contenidos, y el intercambio y revisión de productos entre compañeros. Parece evidente que algunos recursos tecnológicos incorporados al uso de los ordenadores abren nuevas posibilidades para estos enfoques alternativos. Esto es especialmente evidente en el caso de mecanismos de portfolios, incorporados ya en numerosos paquetes de software educativo y cuyo uso comienza a demostrar un mayor compromiso de los estudiantes en la autoevaluación y el autoaprendizaje (Read & Cafolla, 1997). El correo electrónico, las bases de datos y las listas de discusión, por su parte, permiten almacenar e intercambiar el trabajo de los alumnos en su proceso y en sus productos, así como acelerar en ambas direcciones los mecanismos de feedback. Pero una vez más, también en el caso de la evaluación la tecnología puede servir para instrumentar y hacer operativa una determinada filosofía del aprendizaje.
Algunas aplicaciones para la evaluación sincrónica o autoevaluación Por evaluación sincrónica del aprendizaje vamos a entender aquí las prácticas basadas en tests de autocomprobación inmediata, y que están orientadas a motivar y guiar al estudiante en su proceso de aprendizaje. Otras herramientas sincrónicas posibles, tales como los chats, no los consideraremos aquí.
El mercado informático ofrece en la actualidad distintas herramientas para construir tests y pruebas de evaluación orientadas a su distribución a través de Internet. Algunas de las más utilizadas son Web@ssessor, desarrollada por la Arizona-based ComputerPREP, Decisive Survey, desarrollado por la Decisive Technology of MountainView, de California, y Question Mark, de la AssessNet. Una descripción detallada de cada una de estas herramientas puede encontrarse en Hall (1997). Nosotros nos detendremos aquí en dos tipos distintos de software cuya utilidad hemos venido experimentando en iniciativas de formación a distancia puestas en marcha recientemente.
- Para diseñar este tipo de actividades son necesarios varios elementos:
plantear una cuestión sobre algún contenido abordado;
ofrecer posibles respuestas a dicha cuestión (generalmente 5), con la posibilidad de que sean correctas una o varias de esas respuestas;
acompañar explicaciones que, a modo de feedback, justifiquen por qué determinada opción de respuesta es verdadera o falsa. De esta forma, al seleccionar una determinada opción, no sólo se sabe si nuestra elección ha sido la correcta, sino también por qué. La figura 1 muestra cómo quedaría el
Diseño de este tipo de ejercicios en la web:
a-Ejercicios de respuesta breve (Jquiz). Otro tipo de ejercicios posible es el de respuesta breve. Consiste en plantear una pregunta que puede contestarse con una o pocas palabras. Para construir un ejercicio de este tipo es necesario:
plantear una cuestión sobre algún contenido abordado;
incluir varias respuestas (hasta 4), válidas todas a ellas para la pregunta planteada. La construcción de un ejercicio de este tipo plantea el problema de que la respuesta que ofrezca el alumno, para que sea correcta, debe ser exactamente igual a la que nosotros introdujimos inicialmente. Ello exige que la pregunta esté planteada con claridad, admita sólo un tipo de respuesta, y ésta se componga de muy pocas palabras. Un tipo de contenido fácilmente aplicable a estos ejercicios es el relacionado con escribir el concepto definido en el enunciado.
b-Ejercicios de tipo crucigrama (JCross). Un crucigrama también puede constituir una actividad en la que se pida, por ejemplo, identificar un concepto a partir de su definición.
En este caso, los elementos necesarios serían los siguientes:
seleccionar las palabras que queremos que aparezcan en el crucigrama;
establecer la distribución de estas palabras horizontal o verticalmente;
incluir la definición para cada una de estas palabras, teniendo en cuenta que a partir de esta definición el alumno deberá identificar la palabra correspondiente. a. Ejercicios para relacionar (JMatch). Estos ejercicios son los típicos que presentan dos columnas para relacionar los elementos de una con los de otra.
La condición es que cada elemento de la columna izquierda tenga una sola correspondencia con otro elemento de la columna derecha. Para la realización de un ejercicio de relacionar, al alumno después se le muestran todas las opciones posibles de la derecha, debiendo elegir en cada caso la apropiada. También es posible incluir gráficos, tablas, etc., a partir de los cuales establecer los criterios de relación. b. Ejercicios para rellenar huecos (JCloze). Otra modalidad de ejercicios que se pueden utilizar con el HotPotatoes es la de rellenar espacios vacíos en un texto con palabras claves. Evidentemente, el texto debe ser lo suficientemente explícito y contener las pistas necesarias para indicar las palabras que faltan.
Puede ser útil, por ejemplo, para realizar un resumen general de una serie de contenidos.
Los elementos necesarios para construir una prueba de este tipo son: redactar un texto completo:
seleccionar en él palabras claves, que serán las que el alumno deberá identificar;
proporcionar varios sinónimos (hasta 3) válidos para cada una de esas palabras claves. Conviene recordar que el texto que redactemos debe permitir identificar con relativa claridad las palabras que faltan; ello implica que tales palabras, o los sinónimos que pensemos para ellas, deben tener cierta relevancia en el conjunto de contenidos al que hagan referencia.
3.2. Pruebas de autoevaluación adaptativas: Question Mark Perception 2
Un paquete integrado de software mucho más potente y sofisticado que el anterior, pero con un mayor número de requisitos técnicos y económicos, es el elaborado por Question Mark Computing (http:www.qmark.com/perception). Perception es un software diseñado expresamente para la creación de tests, cuestionarios y otras formas de evaluación para su uso a través de Internet o de intranets. Ha sido pensado básicamente para la evaluación del aprendizaje a distancia en contextos universitarios, aunque no se descartan otros posibles usos.
El rasgo más característico de Perception, que le proporciona su potencialidad para aprendizaje a través de Internet, es la posibilidad de construir bancos de ítems que después se seleccionan al azar para configurar una sesión concreta, que es con la que se encuentra el alumno en la web. Esta sesión puede diseñarse con distintos niveles de dificultad, de forma que el alumno ve aumentar o no la complejidad de las preguntas en función de las respuestas que vaya ofreciendo.
En este sentido, las pruebas realizadas con Perception entran en la categoría de lo que se conoce como Tests Adaptativos Computerizados(TAC). Frente a los tests convencionales, en los que todos los alumnos deben responder a los mismos ítems siguiendo una secuencia previamente establecida, los TACs traen consigo la idea de unos tests adecuados a la situación particular de cada alumno, adaptando el nivel de dificultad de sus ítems en función de las respuestas que cada uno vaya ofreciendo (Renom, 1993).
En relación con las posibilidades que ofrece, Perception es un software relativamente fácil de usar. Con la primera de sus aplicaciones de Windows, Question Manager, el formador puede diseñar todos los ítems que quiera en torno a un tópico o subtópico concretos y agruparlos siguiendo criterios jerárquicos. Los tipos de preguntas posibles son también variados, con mayores posibilidades que los que permiteHotPotatoes: actividades de respuesta múltiple, de opción múltiple, de verdadero-falso, de relacionar, de rellenar, tipo matriz, numéricas…
Al elaborar cada pregunta, el formador decide qué puntuación corresponderá a cada una de las respuestas, admitiendo también la posibilidad de que una contestación sea parcialmente válida. Igualmente, cada posible respuesta puede ir acompañada de un feedback que justifique por qué se trata de una opción válida o incorrecta.
Con la segunda de las aplicaciones de Windows, Session Manager, el diseñador puede decidir de cuántas preguntas constará la prueba, si se seleccionarán aleatoriamente, y si el alumno podrá avanzar a través de ella de forma jerárquica en función de las respuestas que vaya dando.
También con un nivel de dificultad equivalente, o bien se le ofrecerá la posibilidad de acceder a la parte de contenidos relacionados con los tópicos que se evalúan para su revisión, o bien ambas cosas, todo ello en función de las opciones tomadas por el diseñador de la sesión. En todos estos casos, al alumno se el proporciona al final un informe que recoge el porcentaje de respuestas acertadas y erradas, y el feedback correspondiente a cada una de ellas. Igualmente, el formador recibe un informe autogenerado con diversos datos relacionados con el rendimiento manifestado por el alumno en cada una de las pruebas realizadas.
Y al finalizar todo este proceso de evaluación, recordaremos que la RETROALIMENTACIÓN, se establecerá a continuación, por lo que la dinámica evaluativa es un FLUJO CONTÍNUO que no terminará hasta que nuestro USUARIO alumno haya terminado su proceso formativo con la consecución de los objetivos que se pretendían en un principio, dejando siempre abierto el sistema, para que en algún momento pueda volver a él para utilizar algunos aspectos que había probado y que considera puede mejorar o cambiar.
Farnos Miro, Juan Domingo: “la retroalimentación nos hace pensar” http://blogcued.blogspot.com/2013/11/la-retroalimentacion-debe-hacernos.html
En un futuro que casi ya es presente, las habilidades más demandadas serán la escucha activa, el habla, el pensamiento crítico y la comprensión lectora, mientras que las habilidades menos importantes incluyen la ciencia, la programación y el diseño de tecnología.
En otras palabras, las “habilidades blandas” serán más necesarias para el trabajo humano. Si bien esto puede parecer obvio para muchos educadores, es refrescante escuchar esto desde una perspectiva comercial también.
Como dice Tony Bates, no podría mejorar, o si, vaya, las disposiciones siguientes, pero si todo ello está referido a Canadá, sí que soy capaz de extrapolarlo a cualquier lugar del MUNDO, y de una forma categórica
No puedo mejorar el resumen en el informe en sí:
- Más del 25% de los empleos canadienses se verán gravemente afectados por la tecnología en la próxima década. La mitad completa pasará por una revisión significativa de las habilidades requeridas
- Una evaluación de 20,000 clasificaciones de habilidades en 300 ocupaciones y 2.4 millones de vacantes esperadas muestra una demanda creciente de habilidades fundamentales tales como pensamiento crítico, coordinación, percepción social, escucha activa y resolución de problemas complejos.
- A pesar del gran desplazamiento laboral proyectado en muchos sectores y ocupaciones, se espera que la economía canadiense agregue 2.4 millones de empleos en los próximos cuatro años, todo lo cual requerirá esta nueva combinación de habilidades.
- El sistema educativo, los programas de capacitación y las iniciativas del mercado laboral de Canadá no están diseñados adecuadamente para ayudar a los jóvenes canadienses a navegar esta nueva economía de habilidades.
- Los empleadores canadienses generalmente no están preparados, a través de la contratación, la capacitación o el readiestramiento, para reclutar y desarrollar las habilidades necesarias para hacer que sus organizaciones sean más competitivas en una economía digital.
- Nuestros investigadores identificaron una nueva forma de agrupar trabajos en seis “grupos”, basados en habilidades esenciales por ocupación y no por industria.
- Al centrarse en las habilidades fundamentales requeridas dentro de cada uno de estos grupos, es posible un alto grado de movilidad entre trabajos.
- La fluidez digital será esencial para todos los trabajos nuevos. Esto no significa que necesitamos una nación de codificadores, sino una nación que sabe leer y escribir digitalmente.
- Competencias globales como conciencia cultural, lenguaje y adaptabilidad serán demandadas.
- Prácticamente todas las ofertas de trabajo darán gran importancia al juicio y la toma de decisiones, y más de dos tercios valorarán la capacidad de administrar personas y recursos.
Entonces, no, la automatización no va a eliminar todo el trabajo para los humanos, pero va a cambiar mucho la naturaleza de ese trabajo, y es en este sentido que la tecnología será disruptiva. Se necesitarán trabajadores en el futuro, pero deberán ser trabajadores muy diferentes del pasado.
Esto tiene implicaciones masivas para la enseñanza y el aprendizaje por lo que afirmo que los SISTEMAS EDUCATIVOS ACTUALES, están diseñados inadecuadamente para ayudar a los jóvenes a navegar por esta nueva economía de habilidades.
Las habilidades más demandadas serán la escucha activa, el habla, el pensamiento crítico y la comprensión lectora, mientras que las habilidades menos importantes incluyen la ciencia, la programación y el diseño de tecnología.
En otras palabras, las “habilidades blandas” serán más necesarias para el trabajo humano. Si bien esto puede parecer obvio para muchos educadores, es refrescante escuchar esto desde una perspectiva comercial también.
(¿Qué significa esto para enseñar y aprender?
Hay varios desafíos que veo:
-primero: hacer que los profesores e instructores acepten que estas (y otras) habilidades deben enseñarse dentro de cualquier dominio de la materia; -segundo:ya que no es probable que estas habilidades se desarrollen dentro de un curso único, identificando la mejor manera de enseñar estas habilidades a diferentes edades, a lo largo de un programa de estudio, y de hecho durante toda la vida; :tercero: codificando estas habilidades en términos de métodos apropiados de enseñanza y evaluación; Con demasiada frecuencia los educadores afirman que están enseñando estas habilidades, pero si es así, a menudo está implícito o no está claro cómo o incluso si los estudiantes adquieren estas habilidades.
Necesitamos determinar cómo la mejor tecnología digital / e-learning puede apoyar el desarrollo de habilidades. Por ejemplo, el aprendizaje digital bien diseñado puede permitir la práctica de habilidades y la retroalimentación a escala, liberando a los docentes y los instructores para que se centren en lo que debe hacerse cara a cara.)
——–Eso, evidentemente sí que es mejorable y de hecho lo doy por amortizado: no serán ya más los docentes que digan a los discentes el qué y el cómo hacerlo, sino que serán los aprendices quienes se responsabilicen de su aprendizaje.
——–El aprendizaje será a lo largo de toda la vida y el reconocimiento social no será a base de títulos y monopolios de instituciones educativas, sino que aprendizaje, trabajo, etc, convivirán juntos como una sola “alma”.
——–Los aprendices serán quienes piensen, diseñen, ejecuten y retroalimenten, tanto las habilidades como su transformación en otras, siempre de manera inclusiva, y decidirán el momento de cada uno de ellos.
Las tecnologías, evidentemente serán siempre disruptivas, pero por encima de ellas, las personas con su disrupción estarán siempre pendientes de su evolución.
Cuando le damos el control y la autonomía de los estudiantes a aprender de la manera que quieran con las herramientas que ellos quieren, los resultados son fantásticos y los estudiantes están asociados con su maestro en el diseño de métodos de aprendizaje, herramientas y entornos que son los mejores para ellos.
juandon